Como congelar y descongelar la Carne
Para conservar las carnes por más tiempo y que estas guarden todas sus propiedades es necesario congelarlas. Congerlar carnes es un procedimiento que hay que realizar correctamente para asegurarse que la carne conservará sus propiedades cuando queramos consumirla.
Es habitual que este proceso se realice de manera incorrecta, al igual que ocurre con el proceso inverso, descongelarla. Vamos a mostrate aquí cual es la manera correcta de congelar y descongelar las carnes.
CONGELACIÓN
– En primer lugar tenemos que tener en cuenta que la carne que vallamos a congelar tiene que ser fresca. No es conveniente dejarla demasiado tiempo en la nevera, sino que tenemos que congelarla lo más pronto posible.
– Si tenemos una pieza grande de carne debemos cortarla en piezas más pequeñas, de un tamaño que estimemos es el que vamos a consumir. Esto es importante pues no podemos descongelar la carne utilizar un trozo y volver a congelar el resto pues se rompería la cadena de frío y la carne perdería todas sus propiedades aparte de que se acelera el movimiento.
“Una vez descongelada la carne esta no puede volver a congelarse.”
– Debemos meter cada pieza en bolsas y separadores para congeladores que son bastante económicas. Si no disponemos de bolsas para frigorífico en ese momento, podemos envolver las raciones de carne en papel de aluminio.
– Hay que desgrasar la carne antes de congelarla.
– Según el corte, la carne puede congelarse entre 6 meses y un año.
DESCONGELACIÓN
De nada sirve todo lo anterior, si en el momento de descongelar la carne lo hacemos de modo incorrecto. Es necesario que el proceso de descongelación se produzca de forma lenta y natural.
Sacaremos la carne del congelador y la pasaremos a la nevera. Que aunque se tarde más en descongelar ayuda a que la carne conserve mejor su sabor. No es recomendable descongelarla a temperatura ambiente.
Una vez descongelada tenemos que utilizarla de inmediato pues se estropea más rápidamente.
Recordad que es muy importante NO volver a congelar la carne descongelada (EN EL MISMO ESTADO), aunque si cocinamos la carne si es posible volver a congelarla.