Cómo Congelar Patatas para Freír y Conseguir que Queden Crujientes y Deliciosas

¿Alguna vez te ha pasado que compras una bolsa de patatas para freír y no alcanzas a usarlas todas antes de que se echen a perder? ¿O tienes antojo de patatas fritas crujientes, pero no tienes tiempo de pelar y cortar las patatas? No te preocupes,  ¡tengo la solución!

Hoy te voy a enseñar cómo congelar las patatas para freír y obtener unas papas crujientes y deliciosas, justo como si las hubieras hecho al momento. Además, podrás tenerlas listas en cualquier momento sin el estrés de pelarlas y cortarlas.

Ingredientes

• Patatas (cantidad según desees congelar)
• Sal al gusto
• Agua

Instrucciones para Congelar Patatas para Freír

Paso 1: Preparar las Patatas

1. Lavar bien las patatas y pelarlas si lo prefieres. A mí me gusta dejarles la piel porque aporta más sabor y nutrientes, pero eso es completamente opcional.
2. Cortar las patatas en el tamaño que prefieras para freír: bastones, rodajas, cubos, etc. Recuerda que el tamaño afecta el tiempo de cocción.

Paso 2: Cocción Previa

3. Hervir las patatas: Pon una olla con agua y añade sal al gusto. Cuando el agua esté hirviendo, agrega las patatas y cocínalas durante unos 10 minutos o hasta que estén tiernas pero no deshechas. Es importante no pasarse de cocción para que las patatas no se rompan al congelarlas.

Paso 3: Enfriar y Secar

4. Escurrir las patatas y dejar enfriar sobre un paño de cocina o papel absorbente. Secarlas bien es esencial para evitar el exceso de humedad que pueda afectar el proceso de congelación.

Paso 4: Congelación

5. Coloca las patatas en una bandeja o recipiente apto para el congelador, dejando espacio entre ellas para que no se peguen. Mete la bandeja al congelador y deja que las patatas se congelen completamente, lo cual suele tardar unas 2-3 horas.

Paso 5: Almacenaje

6. Una vez congeladas, coloca las patatas en una bolsa de plástico o un envase hermético. Así podrás guardarlas en el congelador durante varios meses sin perder calidad ni sabor.

¿Cómo Freír las Patatas Congeladas?

Cuando se te antojen unas patatas fritas crujientes, solo debes sacar las patatas del congelador y freírlas directamente en aceite caliente, sin descongelarlas. El proceso es rápido:

• Freír las patatas durante unos minutos hasta que estén doradas y crujientes por fuera, pero tiernas por dentro.
• Escurrirlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
• Salar al gusto y ¡listo! Tendrás unas patatas fritas congeladas deliciosas en un abrir y cerrar de ojos.

Consejos Útiles – Cómo Congelar Patatas para Freír

• Si deseas un toque extra de sabor, puedes sazonar las patatas con tus especias favoritas antes de congelarlas.
• Asegúrate de que el aceite esté lo suficientemente caliente (unos 180°C) para obtener el mejor resultado crujiente.
• Las patatas congeladas se pueden almacenar durante meses sin perder su sabor ni su textura.

¡Y eso es todo! Ahora ya sabes cómo tener patatas listas para freír en todo momento, sin complicarte. ¿Te animas a probar este truco? Cuéntame cómo te van quedando y si tienes alguna duda o sugerencia, déjala en los comentarios. ¡Hasta la próxima, cocinillas.